NACISTE PARA SER EXITOSO EN ESTE MOMENTO.
Existen rarezas como las avispas, que en la naturaleza, nos cuesta creer que son seres con un grado de inteligencia. Pero es algo que uno descubre porque algo le sucede, para aseverar cierto hecho o descubrimiento, por cuanto como seres pensantes, queremos comprender el porque de todo lo que nos rodea a causa de nuestra curiosidad.
Nuestra vida es un permanente proceso de aprendizaje, de aciertos y errores, pero lo más importante es que aprendemos por experiencias.
Cuando niño me apasionaba la biósfera y quería conocer el porque de cada cosa. Era un curioso, experimentaba de todo y le hacía frente a todo. Una de las cosas que hice fue criar avispas. Uno diría que estoy delirando, pero lo voy a contar algo que lo va sorprender, son unos insectos de lo más inteligentes, de un humor como para tenerles cuidado, además es importante no molestarlas. Pero cuando permanentemente se las acompaña ellas perciben nuestra compañía y saben que no somos sus enemigos después de tanto tiempo de convivencia. He conocido y visto todo el proceso que estos insectos tienen desde su existencia como huevos hasta su madurez.
Recuerdo que en una oportunidad observándolas y dándoles de beber y comer siendo larvas o recién nacida, salida de la celda de su panal, parecían ellas más curiosa que yo. Fue un instante de mi distracción cuando uno de estos seres alados, subió a un palito desde el cual yo le daba comida y agua para toda la colmena y desde el mismo tronquito transitó a mi dedo, cuando me dí cuenta dije para mi interior: “Tenemos un problema Huston”, por temor a que me habría de picar, porque ese era mi paradigma o información primaria, por la experiencia ajena y obviamente lo que atine hacer fue sacudir la mano para el avispón, pensando que así evitaría el ser picado, sin darme cuenta que ese ademán, produciría un impacto sobre toda la colmena. Lo cual alteraría a las más de 100 avispas que estaban en el mismo, para que se abalanzaran sobre el agresor del tremendo colmenar de estos seres.
Allí me di cuenta de lo que renglones más arriba le comentaba en cuanto a su inteligencia, docilidad o carácter, al darme cuenta que mientras me mantuviera quieto, nada me pasaría. Sí, así es que descubrí el carácter de estos insectos, ninguno me picó.
Lo que le quiero decir con esto es que en la vida existen miles de situaciones, temores que nos incomodan o intranquilizan porque pensamos más allá de lo que corresponde, tenemos temores, algunos de ellos infundados u otros son producto del instinto de conservación propio de todo ser que vive sobre la faz de la tierra.
Pero existen procesos mentales donde se produce un envenenamiento de nuestro ser a consecuencia de pensar más allá de la cuenta, al suponer o creer que algo malo pasará.
Por allí en el vasto mar de los proverbios antiguos o no tan antiguos se dice: “Que si preocupándote solucionas tus problemas, preocúpate. Pero si preocupándote no los solucionas, ¿para que te preocupas?”.
Está demostrado científicamente que del 100% de nuestros temores menos del 10% tienen una probabilidad y no cierta de acontecer.
¿Porque entonces teniendo todos los números a nuestro favor procedemos o nos desenvolvemos con temor?.
La respuesta está en nuestros paradigmas, los cuales nos fueron inculcados en nuestra infancia, no haga esto o aquello, cuidado te puedes caer, si a mi me pasó a vos también te puede pasar y así la lista sería interminable como para que usted se sienta identificado con el rosario de atrofia espiritual. Digo rosario porque son oraciones, todas mezquinas, ninguna de ellas nos eleva, por el contrario todas son advertencias. Nos hacen ver como inútiles, paralíticos, ciegos, leprosos, como los peores seres, pecadores e inservibles.
Cuando en lo más profundo de nosotros fuimos creados como seres ilimitados, no tenemos ni principio ni fin, somos parte de Aquel que de la nada lo hizo todo por el solo hecho de expresar su pensamiento al decir. SEA LA LUZ Y FUE LA LUZ DEL PRIMER DÍA. Luego agregó y vio QUE ERA BUENO.
¿No será tiempo de generar luz en un mundo lleno de mediocridad, como seres de naturaleza divina?, ¿No será que tenemos alas y alguien nos hizo creer que somos gusanos para arrastrarnos toda la vida?.
En lo personal prefiero gastar mi tiempo animando, levantando al cansado y dando agua al sediento en medio de un desierto de pensamientos negativos.
Serás lo que sueñas ser o no serás nada. Sueña, SUEÑA A LO GRANDE. Extiende tus alas y vuela por encima de la tormenta, TU PUEDES.
MUSTAPIC FEDERICO ANTONIO
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