¿Que deporte nos causa nuestra máxima alegría, satisfacción?

No es un tema del deporte que practicamos. Es preguntarnos: ¿que nos llena de mayores satisfacciones?. Podemos practicar la natación, porque nos relaja, pero puede que nuestro temperamento nos exija solo caminar, para reencontrarnos y ordenar nuestras ideas. Puede que seamos de aquellos que nos apasiona el fútbol, practicarlo, jugarlo y ¿por que no?, buscar la posibilidad de ser un jugador profesional del deporte que mueve multitudes. En realidad existen tanta cantidad de deportes que no nos alcanzaría todos los días del año, para practicar cada uno de los mismos. Le doy un solo ejemplo para que me entienda, como estamos en el mundo y muchas de las cosas que nos gustan tienen formas esféricas, porque no hablar de la redonda. Sí , sí, la pelota, ese invento del hombre, el cual evolucionó hasta transformarse, en algunos de los casos, en pasión de multitudes.
El pueblo de Los Mayas, practicó una suerte del fútbol, o sea ya estamos hablando de un deporte milenario. Pero que tal hablar del tenis, o el mismo de mesa, más conocido como ping pong, y si tocamos el tema del golf. ¡Uy!, me olvidaba del waterpolo. Otro dirá eh, FEDE no te olvides del softball,… handball, socker, voley,… ¿quien da más? En pocas palabra usted se da cuenta que el espectro se amplia y usted desconocía alguno de estos deportes.
¿Qué deporte practica usted?, ¿no siente que lo que hace, no lo satisface?, ¿no lo llena en su ser interior?.
A nivel mundial se gastan millones de dólares, euros, para lanzar o catapultar deportes en los más diversos lugares de la tierra.
En pocas palabras todo se transformó en un gran negocio, dejó de ser un rito, una forma de expresar, manifestar nuestra gratitud, como lo fue ancestralmente a una deidad de las antiguas culturas.
Creo que todo se volvió tan vulgar, mercantilista que hemos perdido lo más importante del deporte, lo cual no depende de ganar al contrincante o bajar, mejorar las plusmarcas.
Nada que ver, nos olvidamos que el mismo, nos debe transportar a un reencuentro personal con nosotros mismos, el buscar competir con nuestro yo interno y poder decir al final de cuenta, lo alcancé.
Creo que uno de los deportes más fantásticos es el alpinismo, es allí donde el hombre o mujer, debe sobrepasar hasta sus propios límites físicos. Se encontrará rodeado de una majestuosidad impensable, en algún momento sentirá que está en la sima del mundo, tal vez llorará por el dolor del frío, pero todo ello no será nada, comparado con haber logrado su meta, hacer cumbre y decir a si mismo: “ LO LOGRE” y pensará: “aún no he dejado de aprender, como tampoco de crecer”. Se impondrá una nueva meta y seguramente lo logrará.
Pero lo más maravilloso, de todo lo compartido, es que aún no hemos logrado la máxima satisfacción, gozo en lo que hacemos y practicamos, porque somos por naturaleza disconformistas, necesitamos superarnos día a día, por cuanto la vida es un deporte, en donde permanentemente buscamos ganarle al límite o barrera que la sociedad nos autoimpone.
Por tal razón, tomémoslo con calma, todo llega, el secreto es la persistencia.
Mustapic Federico Antonio.