Nada es fácil. El secreto es sobrevivir en medio de las presiones...
En nuestro diario vivir escuchamos miles de ideas, soluciones, fórmulas, criterios, proyectos, ..pero en el fondo es como que existe un disconformidad.
Esto me hace recordar una historia de un peregrino que arrastraba una tosca cruz, la cual cargaba sobre sus hombros, después de tantos años la misma le comenzó a molestar. En su peregrinaje, su camino era un muestrario de las más diversas cruces. En una de las encrucijadas encontró una hermosa cruz hecha de rosas, al principio parecía agradable ya que las flores despedían un hermoso aroma, al tiempo de andar con la misma descubre que esta cruz tenía algo peculiar, poseía espinas pertenecientes a los tallos de aquellas preciosidades de la naturaleza. Así vagando un poco más adelante descubrió otra cruz de color azul metálico, a tempranas horas de la mañana se dio cuenta lo fría que la misma era, pero al tiempo de andar descubrió el peso considerable de esta, así siguió un poco mas con esta nueva carga, hasta encontrar otra mas cómoda.
Después de ver muchas otras cruces, se reencontró con una vieja y tosca cruz, la misma con la cual inició este peregrinaje. Sin saberlo, esta cruz era la que mejor le sentaba y con la cual continuo su peregrinaje hasta finalizarlo.
En el camino de la vida, muchas dificultades se nos van a presentar. Habrá falta de: trabajo, comida, comodidad, seguridad,… tendremos muchos problemas.
Pero el secreto está no terminar nuestro peregrinaje en un instante porque la vida es una permanente escuela donde seremos probados, pero en medio de las pruebas debemos saber que todo lo que nos pasa es para nuestro bien. Nos perfecciona, moldea, forma.
Uno de los elementos mas fuertes de la naturaleza es el diamante, pertenece a un elemento común de la naturaleza, es carbón, pero con una gran diferencia, ésta se encuentra en la forma de cómo se acomodan los átomos del carbón en la estructura cristalina de este elemento. Generalmente se forma bajo un conjunto de presiones descomunales.
Puede que nuestro inicio sea muy oscuro, pero las presiones de nuestro diario peregrinaje harán que seamos unos diamantes de muchos kilates. Luego vendrán los cortes del orfebre para tallar la pieza maestra y así darnos la forma para ser engarzados en la pieza de joyería, para la corona de un rey.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario