¿Porque escribo en este blog?. Por causa de nosotros, los que queremos vencer, a pesar que todo se nos vuelve o está en contra nuestro.

¿Cuántas veces no escuchaste o viviste las siguientes frases?:
Hoy mi equipo perdió… en cualquier deporte, me quedé sin trabajo, me descubrieron cáncer, mis hijos murieron, mi familia me abandonó, los amigos me dejaron solo porque tuve un revés económico… y así la lista la podemos hacer interminable de lo que a cado uno le pudo haber pasado, le sucedió o le está pasando hoy día.
Querido amigo que siempre lees este blog, no por casualidad hoy lo estás leyendo.
Hay veces que denuncio cosas cansadoras o molestas de esta isla azul, llamada tierra, en medio de un mar llamado universo.
Otras veces contribuimos con soluciones, porque este blog te pertenece, es un espacio que busca un muy fino y sutil equilibrio para el bienestar de nosotros, los vecinos.
Hoy te comparto una pequeña historia porque escribo y no me canso de compartir un conjunto de frases, que parecen muertas.
Pero la realidad es que cada día que pasa se convierten en una energía tal que transforman lo imposible en posible.
Hace muchos años estaba comprando un libro de una librería virtual, de aquellas que suelen vender libros por Internet.
Recuerdo que en esa oportunidad apareció en escena una de las tantas personas que desconocen al cliente. Pero algo me sorprendió en dicha transacción, casualidad o causalidad, solo se puede saber el resultado al final de los hechos que te comparto:
Todo iba bien hasta que la vendedora me preguntó los datos para finalizar la operación, a lo que respondí: ¿Me extraña araña que siendo mosca no me conozca?...toda librería virtual tiene una DB (Base de Datos del cliente), lo dije para romper lo que creo que es lo difícil de lograr en la Web, el frío de una transacción comercial, sin conocer al vendedor, comprador, su persona, su espíritu…etc...
Existió un cruce de palabras que me sorprendieron, pero en ese momento sentí un alma en pena, alguien que del otro lado necesitaba, cargar las pilas, alguien que aunque no lo conocía, sentía su necesidad.
No siempre lo digo pero creo que llegó el momento de darme a conocer en la red.
Mi perfil tiene un seudónimo de Da-Vid, la razón del mismo es que debo dar vida con lo que pienso, escribo, comparto, pero a la vez representa la historia de un joven casi rey, que mató un gigante llamado Goliat, y así… puedo compartir, muchas de las razones del seudónimo.
Pero volviendo a la historia con la señora o señorita Paula, nunca la conocí personalmente, en ese momento de contacto virtual percibía algo, en ese instante un hecho pasó, fue como una energía, una voz que me decía: “escríbele lo siguiente…. Lo interesante fue que lo que le garabateé parecía la historia de Narnia, el Señor de los anillos de una forma sintética, concisa, apuntando a un confronte con su realidad.
No sabía el efecto ni la razón de dicha acción. Tenía una ventaja, no me preocupaba el papelón de lo que le escribí. Allí parecía que todo había terminado.
Al cabo de unos meses esa mujer vuelve aparecer en escena, ya no por la editorial.
Se me presentó como: “Yo no sé si usted se acuerda de mí, yo soy aquella mujer a la cual usted le escribió exhortándola, animándola a ver las cosas desde otro punto de vista, renegué de sus palabras, hasta que un día algo me pasó y me día cuenta de la existencia de Dios, en todas las cosas que tienen que ver con la vida, hoy lo tengo claro, he recuperado la fe que había perdido en un ser omnipotente y presente en todas mis cosas.
Si usted mi querido vecino piensa que todo ha terminado aquí, esta muy equivocado por todos lados muchas personas con las cuales he compartido palabras, las cuales son dinamita pura han recibido su milagro.
Personas con cáncer han sido sanadas, personas sin trabajo lo consiguieron, padres que perdieron hijos se reencontraron con ellos, en fin es un placer decirles que: El sembrador salio a sembrar y la semilla que calló en tierra fértil germinó y dio fruto en cientos de milagros que todos los días se acrecientan en aquellos que proclaman:
HOY SOY UNA NUEVA PERSONA, LAS COSAS VIEJAS PASARON, TODAS SON HECHAS NUEVAS EN EL FUNDAMENTO DEL AMOR INFINITO.
Federico Antonio Mustapic