Todos podemos, aunque unos pocos digan imposible.
¿Cuál es la fórmula?¿Existe un secreto para lograr lo imposible? Pues sí, es muy sencillo, pero de tan simple, nos lo cuesta creerlo.
Pertenecemos a la cultura del: “sin sacrificio no hay premio”, “sin dolor nada se logra” y tantas mentiras que no tiene sentido mencionarlas.
La verdad no es así. ¿No merecemos ser felices en esta vida?
Desde pequeños, muchos de nosotros por influencias religiosas o familiares, algunas de ellas con características bloqueadoras, nos marcaron, para frenar nuestro progreso o evolución. Para ello se valieron de ciertas frases: “Tu eres del medio, serás el más sufrido”, “ Si a mi me pasó a vos también te va a pasar”,...
Hasta que descubrí el misterio: “Somos el milagro más grande de la perfección, en la creación”.
Muchos científicos, no puede explicar como el hombre siendo el ser más indefenso al nacer, pudo sobrevivir a tantas plagas, desastres naturales, cataclismos devastadores.
En nuestra forma de expresarnos, en el momento de despertarnos, en el tiempo de pensar, en el instante de decidirnos, en el método de producir, trabajar, de generar ideas o lo que sucederá, dependerá enteramente de nosotros mismos.
Somos nosotros quienes condicionamos nuestro futuro, las decisiones que tomamos son trascendentes.
Pero muchas de las alternativas que elegimos como para empezar un día, un empleo, un trabajo, un noviazgo, una carrera, todo en general, está como paradigmáticamente condicionado.
Muchas veces nos preguntamos: ¿Cómo pude equivocarme tan toscamente?, ¿Por qué no elegí otra cosa?, o ¿no hay nada mejor para mí?, son tantas las preguntas que nos formulamos que en realidad toda nuestra vida no alcanzaría para descifrar o mejor aún lograr con una permutación de circunstancias en nuestra elección, mejorar todas las alternativas posibles, como para que sus consecuencias, nos favorezcan.
En definitiva no podemos estar seguros que nuestra razón, nos ayude a mejorar nuestro destino al ciento por ciento, podemos minimizar el impacto o el efecto de nuestra opción.
Ahora la pregunta del millón es ¿Cómo puedo lograr mejorar mi probabilidad de exito?, ¿Cómo puedo estar seguro que lo elegido nos puede favorecer?...en este nuevo parámetro, existe la intuición, el olfato.
Pero existen otros factores que nos pueden condicionar: la presión psicológica, el stress, el pesimismo, la baja autoestima, estos factores condicionantes, pertenecen al tipo de categoría cuasiespiritual, tal vez una de las más importantes, al momento de optar por diversas encrucijadas. Porque en definitiva aunque tengamos todo en contra nos hará conquistadores, exitosos, felices, completos, satisfechos en lo que emprendamos.
Desarrollando el párrafo anterior para su comprensión: Recuerdo el caso de dos atletas los cuales se enfrentaron en una carrera de 100 m uno tenía todas las condiciones, características físicas, atléticas como para ganar cada una de las series, semifinal y final de esta prueba de velocidad. Pero al momento de enfrentarse el “number one” con su acérrimo competidor, sucedía lo impensable el segundo en oportunidad, le ganaba al primero en probabilidad, aunque tuviera varios defectos. El que más próximo estaba a la figura del más apto por condiciones atléticas, jamás podía ganarle, pero lo rebasaba. ¿La razón? una sola, el mejor atleta obtenía su máxima performance sin presiones de tipo psicológicas o estresantes. Es más, batió el record mundial, sin tener en la competencia alguna amenaza psicológica
De todo lo expuesto puedo animarte en este día bajo un concepto que no todos conocen es el termino de la sinergía espiritual, un grado por debajo de esta se encuentra la resiliencia, ambas tienen el fundamento en un nuevo concepto muy trillado que raya lo ilógico, pero a la vez asombroso. El poder del espíritu sobre la materia.
Aclarando el concepto de la palabra "sinergia", esta tiene su origen en el idioma griego y su traducción literal sería: cooperación; no obstante (según los conceptos de los estudiosos del idioma español, se refieren a esta palabra como al resultado de dos (o más) causas cuyo efecto es superior a la suma de los efectos individuales. En biología, se menciona al proceso activo y concertado de varios órganos para realizar una función. Su traducción al idioma inglés es la palabra synergy.
Con respecto a la sinergía recuerdo otro hecho interesante para tenerlo en cuenta:
"Puede ser que no seamos tan buenos atletas como ellos, pero peleamos como equipo. Saltar más alto y correr más rápido no es lo que siempre te lleva a ganar. Este es un deporte de equipo, no es tenis.", ilustró Theodoros Papaloukas, jugador de basquet de la selección nacional de Grecia, refiriéndose a la victoria de su equipo frente a la selección de los Estados Unidos en una de las semifinales del mundial de Japón 2006.
Es así puedes tener todo, pero desperdigado, nada lograrás. Pero si unes tus convicciones, sueños, fortaleza interior, objetivo, motivación, espíritu, mente y alma lograrás tu objetivo, porque la sinergía espiritual tiene en sí el aliento de la fe, la cual eleva la potencia de tus posibilidades al infinito.
¿Se pusieron a pensar si por un instante toda América Latina se propusiera estar de acuerdo acerca de cualquier cosa, lo que podría lograr?. Mis vecinos, los chinos son un ejemplo de lo que les comparto, hicieron la muralla china la cual se ve desde la Luna, nuestro satélite natural.
Debemos tener cuidado con aquellos que nos dividen, con propósitos hegemónicos o de poder. Unámonos como familia, como equipo, como nación, como continente y desprendámonos de todo aquello que ha producido retraso, para lograr nuestra felicidad.
Federico Antonio Mustapic
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