Hablamos de todo en este blog, pero hoy quiero llamar a la reflexión...

No quisiera que con una historia como la que escucharás en este video, que puede ser real, vayas ahora abrazar a tu hijo y digas lo que jamás le dijiste y hagas lo que nunca hiciste por él, porque no lo va a entender.
El secreto está en darle todos los días un poco de amor, afecto, tu tiempo, fundamentalmente calidad del mismo.
Seguramente te ha pasado como a mí, de estar lejos de tus hijos y cuando estás viajando te acuerdas de ellos, pero cuando llegas a tu hogar después de un día de trabajo agotador, te olvidas lo que pensabas hacer al encontrarte con tu familia.

No digas que ellos lo saben. No conozco a nadie que se haya puesto de novio diciendo: “Ella sabe que la amo”, seguramente tuviste que regalarle flores, presentes, darle un beso y tantas cosas, ¿verdad?, pero nunca pensaste o dijiste: “vos lo sabes …”.
Parece una tontería pero es tiempo de ver las cosas desde una nueva perspectiva.
No dejemos pasar el momento, es tiempo que nos reencontremos con nuestros seres queridos, siempre, en un dialogo profundo que nos anime, fortalezca, pero por encima de todas las cosas, nos genere un nuevo y fresco sentimiento fundado en un insondable amor sincero, aún hasta entregar nuestra vida por un ser querido.